Libertador… Escucha … Sonó la grave hora,
Ya tu Bizancio emerge de su letargo adusto,
y de su seno, en breve, saldrá la voz sonora
que llevará a los pueblos tu pensamiento augusto …
La voz salvará montes, trasplantará fronteras,
dilatará a los vientos la excelsa profecía
y asiento de granito será la patria mía
para la más gloriosa de todas tus quimeras.
Y surgirá, compacta tu América soñada
bajo la milagrosa custodia de tu espada
que en nuestra historia fulge y al Universo asombra.
Y el jubiloso grito de nuestra anfictionía
compensará la negra y honda melancólica
con que ha esperado tu alma cien años en la sombra.
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