A la memoria de mi madre, Tomasa, que nació en esta fecha.
Nuevamente la muerte está en mi casa
Con fusiles y tanques
nuevamente
Con aviones y rockets
nuevamente
Sus manos pálidas
sus ojos turbios
ensucian lo que tocan o miran
Sus pies de hierro
abren cráteres en las calles
y la noche tiembla y se incendia
Los niños mueren gritando
los ancianos en silencio
las mujeres en el punto
donde la ternura se detiene
El cielo es como fango ahora
el mar no es azul
y la vida es una pústula en el alba
en el día
en la larga noche de las bombas
¿Quién cae
quién llora maldice y se levanta
aferrado a su patria
a su ciudad
al humo
a la sangre
a las ganas de vivir
para arrebatarle a la muerte otra victoria?
Las tierras de México
de Cuba
de Nicaragua
de Haití
de Dominicana
y de Granada
han sabido de esto
Y en la mía no se borra el pasado
ni el presente
ni el futuro
Un tiempo y otro están allí
una piel y otra están allí
una mano y otra están allí
en el centro de América
en mi casa
donde la muerte no puede contra la vida.
México, 22 de diciembre /89.
Publicado en: Revista Lotería, Nº 399, de Octubre-Noviembre de 1994.