 |
|
|
|
Al tío Sam (1916)
|
No alardees de un poder del que yo río.
Los pueblos saben, aunque no lo creas,
que ante el ruido de las armas europeas
dudaste un día de tu poderío.
|
Arlequín del derecho que sombrío
en la América débil te recreas,
y vas, lleno de irónicas preseas,
repartiendo en botín el suelo mío.
|
Cambia el rumbo, mi raza es un abismo,
su vórtice, en horrendo cataclismo,
te atrae sin cesar... puedes caer!
|
Y arranca la armadura de sus lazos,
porque estás lastimando con tus brazos
el pecho que tú dices proteger!.
|
|
|
|
|
|
|
 |