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Nochebuena!...Algarabía…
en los labios de las madres, la sonrisa;
en los pechos de los niños, la alegría… |
En las vidrieras fastuosas
esas cosas primorosas
que ha encargado el niño Dios;
y paseando entre los lindos arbolitos de esmeralda
con un mundo de juguetes suspendidos en la espalda,
la figura bonachona del ingenuo Santa Claus… |
Nochebuena!...Nochebuena!
los chiquillos se adormecen con la puerta medio abierta,
con el alma muy despierta,
para ver cuando la media se les llena
con las lindas cosas que,
encargaron muy juiciosos en la carta a San José. |
Y a la aurora, el imperio candoroso del engaño;
las insignias militares a granel…
Comandante! Coronel!
Cañonero! Artillero! General!
Napoleones a montones
dirigiendo un ilusorio regimiento colosal! |
Lavanderas!...cocineras
que trabajan con tesón,
restregando los pañuelos contra el rayo
o avivando con cerillas el fogón. |
Delicioso anacronismo
de los tiernos nacimientos infantiles;
en Belén, ferrocarriles
que se enroscan en casetas de cemento… |
Los leopardos y los tigres que hacen nido
a tres pasos de Jesús recién nacido!
El establo, el mulo…el buey…
y entre sus padres, el Rey
de las almas, que retoza
en el fondo de una cuna primorosa de carey! |
Los chiquillos ante el bello nacimiento se enloquecen;
los ancianos se enternecen!
sus recuerdos vuelan lejos…
Un vivir retrospectivo sus conciencias martiriza,
y la niñez va pasando por la mente de los viejos
con sus frescas ilusiones, y sus sueños y sus risas. |
Nochebuena!...Nochebuena!
¿qué misterio hay en tu místico escenario,
que diluye en nuestras almas una paz ultraterrena?
¿Porqué tú, que fuiste nuncio del Calvario,
eres risa y eres gracia, Nochebuena, Nochebuena?.... |
Publicado en:
La Estrella de Panamá. Domingo 11 de febrero de 1973.
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