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Es flaca sobremanera
toda humana previsión,
pues en más de una ocasión
sale lo que no se espera.
MARROQUIN
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Robaste, don Erasmo, diez millones
en la “Prendaria”, banco fraudulento
falsificando viejo documento;
y compraste palacios y blasones.
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A merced de tus joyas y doblones
y a pesar de tu escaso entendimiento,
sueles pasar por hombre de talento,
grandísimo ladrón de los ladrones.
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Sueles pasar entre la honrada gente
que te sabe adular con entusiasmo
como noble, cultísimo y decente.
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Eres un hombre digno, don Erasmo:
eres un hombre probo é inteligente
y ……….esta figura llamase SARCASMO.
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Publicado en:
Nuevos Ritos, Nº 71 y 72 de 1 de septiembre de 1910.
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