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Los animales de la muerte,
por Tristán Solarte
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Ovejas crispadas en actitud de aullar.
Sedosas hasta más no decir ni tocar.
Instrumentadas por soplos de culpa y abandono,
terrenales y distantes abreviadas por mi asombro.
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Me les fui acercando por mil caminos, tembloroso y mortal:
__Toda la historia sea con vosotras hijas del cielo…!
Toda la ternura y la maldad…!
Que vuestro limbo cruel me transparente y me conforte…
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Del libro: Voces y Paisajes de Vida y Muerte.
Segundo Premio Nacional de Poesía,
en el Concurso Literario Ricardo Miró. 1948.
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