Nació en la ciudad de Panamá el 26 de julio de 1794, fueron sus padres el señor Don Pablo Arosemena y la señora Doña Martina de la Barrera. En su juventud aprendió latín y algo de humanidades además de conocimientos generales hasta donde lo permitieron los libros a su alcance. Fue comerciante, periodista y político liberal; figura determinante del movimiento revolucionario de la independencia de 1821 y contribuyó con sus ideas a formar la conciencia cívica en torno al destino histórico de nuestra nacionalidad durante el siglo XIX.
A él le corresponde formar parte del equipo de hombres que introdujeron en el Istmo la primera imprenta y que luego se empeñaron en publicar el primer periódico panameño La Miscelánea del Istmo de Panamá.
Se dedico al comercio, como su padre; por lo que realizo viajes al Ecuador, Perú y Jamaica; en estos países estuvo en contacto con patriotas expulsados de su terruño por las autoridades españolas, en castigo por sus ideas liberales. Es así como Don Mariano Arosemena robustece sus ideas en favor de la libertad de su país natal.
Don Mariano Arosemena, en compañía de Tomás Herrera y José de Obaldía, intervino en la redacción de muchos de los periódicos de los años que van de 1827 a 1841 y bregando solo después, persistirá en la faena periodística hasta el final de sus días. Y no hubo desde el instante de nuestra separación de España hasta mediados de siglo, vocero más entusiasta y eficaz de los intereses económicos del Istmo.
Fue distinguido, por las autoridades españolas, con varios cargos públicos; entre otros, fue Regidor, Procurador y Alcalde ordinario Constitucional en el Ayuntamiento de Panamá. Fue también Capitán de las milicias disciplinadas y posteriormente miembro de la Diputación provincial a la Corte de España. Había sido asignado para este último puesto, cuando ocurrió el magno evento del 28 de noviembre de 1821. Don Mariano Arosemena fue uno de los firmantes del acta que declaró al Istmo independiente de su metrópoli.
Ya unidos a Colombia, Don Mariano Arosemena fue honrado con nombramientos importantes. La provincia de Panamá lo hizo su representante, el Departamento del Istmo lo eligió Senador y el Poder Ejecutivo Nacional lo encargó de la Agencia del Crédito Público, de la Jefatura Política, de la Administración General de Rentas y de otros cargos no menos importantes.
Disuelta la Gran Colombia y constituida la Nueva Granada, en República Independiente, Don Mariano Arosemena fue Representante por Panamá al Congreso Nacional, Administrador de la Aduana de Panamá, Azuero, Veraguas y Chiriquí, así como también fue designado por el Gobierno Nacional para servir la Secretaría de Hacienda, designación que no aceptó.
Creado el Estado de Panamá por el Congreso del año de 1855, tocó a Don Mariano Arosemena, como Presidente de la Convención, firmar su primera Constitución Política. De 1855 a 1868, año de su muerte, Don Mariano figuró como Designado para ejercer el Poder Ejecutivo, como Procurador General del Estado y varias veces como Diputado en sus Asambleas. El Gobierno Supremo le honró nombrándole Encargado de Negocios en el Perú y más tarde Ministro Plenipotenciario, viniendo a ser el Decano del Cuerpo Diplomático en la capital peruana.
Don Mariano se dedico en los últimos años de su vida al periodismo y entre sus importantes escritos podemos apelar a Los Apuntamientos Históricos, una de las obras más importantes publicadas en nuestro país en el siglo XIX.
Don Mariano Arosemena murió el 31 de mayo de 1868, mientras redactaba un artículo en La Estrella de Panamá.
Como un homenaje a su memoria, en Panamá, se ha creado la Editorial Mariano Arosemena, que es una dependencia de la Dirección Nacional de Publicación y Comunicación del Instituto Nacional de Cultura (INAC). Es la instancia ejecutiva que tiene la responsabilidad de publicación de obras que son signo de la excelencia en las letras panameñas y reflejo de nuestra identidad nacional.
Así describía, Justo Arosemena, la muerte de su padre; en un artículo publicado en conmemoración del centenario de Don Mariano Arosemena:
CENTENARIO DE UN PRÓCER
(Fragmento)
"Acostumbraba a levantarse con el alba y empezar a escribir con luz artificial mientras asomaba la del sol. Escribiría el 31 de Mayo de 1868 un artículo que como otros anteriores, versaba sobre la historia de estos países, y titulaba Anales de la América. Era día sábado y debía publicarse el lunes, lo que explica su continuación de este modo:"
"Anteayer 31 de Mayo se cumplieron 25 años de un hecho notable de la historia de la Nueva Granada, hoy Colombia. Su gobierno decretó en ese día y mes del año de 1843, tributar honores a la memoria del Libertador Simón Bolívar. Por el primer artículo del Decreto se dispuso que en la Iglesia metropolitana se erigiese un monumento de honor, en el cual se depositara la urna que contiene las entrañas del héroe; que en el expresado monumento se pusiese en letras de oro esta inscripción: A LA MEMORIA DE SIMON..... "
"Aquí había llegado el escritor, cuando vislumbrado la claridad del día, suspendió su trabajo para continuarlo con ella. A ese fin procuró, como otras veces, empujar las hojas de su ventana que abrían para fuera sobre el patio de la casa Municipal a grande altura, y perdiendo el equilibrio, cayó........ Era mucho para su edad y siete horas después espiraba, con la mayor resignación, sin haber perdido el conocimiento sino en los últimos instantes, en medio de sus hijos sobrevivientes consternados, que le prodigaron todo género de atenciones."
Justo Arosemena
Artículo publicado originalmente en 1894, por cumplirse el centenario de su nacimiento y al cumplirse el centenario de su muerte, la Revista Lotería, reproduce este artículo en su número 150, de mayo de 1968.
MARIANO AROSEMENA, MAESTRO DE PERIODISTAS
(Fragmento)
Entre las figuras de mayor significación en la vida panameña inmediatamente postcolonial, la de Mariano Arosemena interesa de modo particular. Activo político, comerciante y defensor de los intereses mercantiles, hombre intelectualmente inquieto, fue, sobre todo, por temperamento y vocación, escritor público. Puede decirse con verdad que al periodismo dedicó sus mejores energías, al punto de que parece propio proclamarlo maestro del oficio, acaso el más grande periodista panameño del siglo XIX.
Rodrigo Miró
Revista Lotería, Nº150
Publicado en mayo de 1968
|
|