|
|
|
Deseo, prima querida,
ensanchar tu corazón,
con la imagen del que en vida
fué tu tierna adoración.
|
Deseo que en ella veas
el recuerdo de tu amor
y no las tragedias feas
que te llenan de dolor.
|
Si viniesen a tus ojos
las lágrimas en tropel,
sécalas y de hinojos
rogarás a Dios por él.
|
Con la imagen del que en vida
fué tu tierna adoración
deseo, prima querida,
ensanchar tu corazón.
|
Del Libro Jirones de Adolescencia. Roma, 1905
|
|
|
|
|