Gozo el placer
todos los días
de untar la pasta
en la escobillita;
y con la espuma
y el frote rítmico
mis dientes quedan
tan limpiecitos
y tan brillantes
como el rocío.
Con una pasta
y un buen cepillo
brillan cual perlas
mis dientecitos.
Del Libro: Versos Para Niños y Por Los Caminos
De Un Apostolado
A mis hijos y a todos los niños
de mi patria, con todo mi fervor
de madre y de maestra.