Es de buen gusto y de buenas maneras quedarse
callado cuando alguien hable en demasía y entiendes
que el pobre diablo ha metido la pata hasta el
fondo pero no puedes decirle
cuidado
porque entonces serías tú
el que estaría en problemas
y entonces
sí que te encontrarás con la horma de tus zapatos
de allí
que cuando alguien vuelva a hacerlo
dale la espalda
y sigue adelante
en fin
es uno menos
Del libro: De parte interesada. Premio Nacional de Poesía Ricardo Miró 1971.