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Yo sé que volverás! Nuestra ruptura
no causó duelos ni dejó rencores.
De nuevo en el jardín de mis amores
ha de brillar el sol de tu hermosura.
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Nuestro idilio fue más que una aventura
de esas que nacen de entre los calores
de un capricho sensual. Tuvo fulgores
de noble inspiración nuestra ternura.
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Yo sé que volverás, cálida y pía,
a refundir en la existencia mía
todo el rico metal de tus encantos.
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Tú serás como el pájaro viajero
que torna a hacer su nido en el alero
a cuya sombra moduló sus cantos.
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Publicado en:
Revista Lotería, Junio 1945, Nº 49
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